Los
días 21 y 22 de agosto del presente año 2016 tuvo lugar un hecho destacable
para el movimiento comunista español. La escisión marxista-leninista del
P.C.O.E. organizó su tan ansiado y necesario Congreso Constituyente. Entre las
decisiones de importancia destaca el paso del Partido a su actividad como tal,
el fin del período preparatorio de su actividad que lo marcó desde su escisión
del citado partido revisionista en el año 2015.
Ha
sido un año de arduo trabajo que por fin ha dado sus frutos. Uno de estos lo
estáis sujetando entre manos en este preciso instante. En efecto, el Partido
resolvió el problema de la organización tanto de una web activa en Internet
como de un periódico popular (marxista-leninista y accesible).
Nuestro
Comité Central dejó clara la importancia de un periódico para comenzar la labor
de organización de las masas trabajadoras y del proletariado en torno a su
vanguardia comunista, por la revolución proletaria como fin estratégico. El
periódico debía ser una herramienta de combate efectiva que sirviese fielmente
a su cometido de elevar la conciencia de clase del proletariado para que
señalase el camino al resto de clases trabajadoras y humildes.
Pero
nuestra labor en el Congreso no se limitó a esto. Se trataron cuestiones de
importancia desde la óptica científica del marxismo-leninismo, entre las cuales
destacamos la cuestión nacional, la cuestión de la unidad de los comunistas en
el Estado, la cuestión de la política de masas bolchevique, etc... Esto queda
reflejado con precisión en nuestros estatutos oficiales y nuestro Programa [Nota nuestra. Que se publicarán posteriormente].
Dejamos
claro, además, que sin la autocrítica fundamentada en los aportes científicos
de los cinco clásicos del marxismo sería imposible crecer. Dichos clásicos no
pueden ser otros que Karl Marx, Friedrich Engels, Vladimir Lenin, Iósif Stalin
y Enver Hoxha.
Nuestro
Partido desoye las mentiras con las que algunos supuestos comunistas que se
dicen defensores de dichos clásicos cubren la doctrina de éstos. La doctrina
comunista avanza aplastando a sus enemigos, y estos para combatirla y no
perecer en los primeros intentos necesitan “vestirse” de simbologías
comunistas, boquear esporádicamente algún slogan de los clásicos
marxistas-leninistas, etc. Y este fenómeno general se concreta en nuestro país,
¡cómo no! Podemos ver como organizaciones comunistas hundidas en el barro y
desenmascaradas (cada día más por nosotros –ayudados por su soberbia torpeza
también-) pretenden esconder su oportunismo y revisionismo bajo la bandera de
los cinco clásicos del marxismo-leninismo, sus posiciones nacionales e
internacionales proimperialistas y contrarrevolucionarias con argumentos
idealistas y de lo más surrealistas, mientras que otros pretenden excusarse en
que no podemos tomar en consideración la obra de otros grandes pensadores y
revolucionarios marxistas como Georgi Dimitrov, José Díaz, Joan Comorera,
etc...
Nuestro
Partido dejó claro en su primer congreso que hay una diferencia insalvable
entre los verdaderos comunistas y los sentimentalistas rojos. Los primeros
toman los problemas y los observan mediante el prisma científico del
marxismo-leninismo. Los segundos se acogen a prejuicios sobre figuras
pretendidamente revolucionarias. En el campo de éstos últimos no podemos dejar
de meter a partidos revisionistas que, como el P.C.E (r) han ganado un
indudable apoyo por parte de los comunistas más jóvenes, confundiendo la cruda
e injustificable represión y tortura de los militantes de dicho partido con que
éstos por ello hubiesen mantenido una “línea justa”. Pero debemos recordarles
que en el Imperio Ruso (por poner un ejemplo), los populistas (antimarxistas y
pequeñoburgueses) eran condenados sumariamente y asesinados como ganado. Esto
no les hacía tener razón. Se puede ser torturado y no tener una posición
marxista-leninista. No entenderíamos la condena de Puig Antich (último preso
-anarquista- condenado a garrote vil por el régimen de Franco en los años
setenta) si no comprendemos esta verdad.
Dejamos
claro que una cosa es solidarizarse con el padecimiento de los presos políticos
revisionistas, pero que esto nunca jamás debe ser confundido con un apoyo
ideológico. El mismo P.C.E. (r) canta loas a un conocido vitoreador de la
burguesía nacional (que como clase existe de la explotación capitalista a la
que somete al proletariado, igual que la extranjera, aunque pueda unirse al
proletariado en la guerra de liberación nacional desde un interés radicalmente
opuesto, como sus intereses de clase), como es Mao Zedong, y cuando se supone
que se “rectificó” esta postura; 1. No se hizo una verdadera crítica a su
pasado maoísta y 2. Se ha comenzado a
ensalzar al imperialismo ruso (cabe ver su polémica con ex-militantes del grupo
oportunista-revisionista del P.M.L. – R.C. a través de la “Universidad” “Obrera”
acerca de la cuestión de Rojava, que ambos resuelven de manera errónea).
El
I Congreso de nuestro Partido abrirá sin duda un camino plagado de dificultades
por el cuál andaremos con paso firme, armados con la ciencia leninista, sin la
cuál sería imposible dar un sólo paso sin precipitarse al lodazal revisionista
que nos condenaría (como enseña la historia y concretamente en el caso del
movimiento comunista español). Pero sabemos que encontraremos el final de este
camino y que escalaremos la cima de la revolución y la construcción del
comunismo mediante la dictadura del proletariado. Este camino es difícil y
largo, sí. Pero nuestro I Congreso nos ha marcado el camino.
¡Comunistas!
¡Sigamos la senda por la que nos guía el primer congreso del Partido Comunista
del Trabajo de España!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.