El programa
mínimo se define como aquél documento en el cuál exponemos las medidas y
reivindicaciones inmediatas, realizables en la actual situación
socioeconómica, mediante las cuáles pretendemos guiar las reivindicaciones que
nuestro Partido transmitirá al movimiento obrero y popular. El programa mínimo
es la serie de medidas con las que impulsaremos el movimiento revolucionario.
Este programa mínimo corresponde a las condiciones objetivas del momento
histórico-concreto que estamos atravesando. El programa mínimo no es, pues,
algo independiente de nuestra línea programática general y de nuestro programa
máximo (la línea estratégica), sino que es parte de ella; ambas están
indisolublemente interconectadas. Son, pues, dos etapas diferentes: una, el
programa mínimo, la inmediata y otra, el programa máximo, la general. Y
finalmente teniendo todo esto en cuenta formulamos los siguientes puntos:
1. Mejora de las condiciones materiales y culturales de la clase obrera y de los trabajadores:
1. Mejora de las condiciones materiales y culturales de la clase obrera y de los trabajadores:
1.1. Igualación salarial de la mujer con el
hombre, de forma inmediata.
1.2. Salario mínimo interprofesional de
1400 euros. A propósito del establecimiento del salario mínimo se prohibirá bajo pena severa el pago en especie. Fijar como
salario máximo y supremo el del obrero veterano. Todos los demás salarios
descenderán de aquél. Primero,
sólo se trata de la ley "de cada cuál según su capacidad, a cada cuál
según su trabajo". Pero entre esto y el comunismo hay un perfeccionamiento
de aquella norma que barre más restos de derecho burgués, según la cuál se
toman en cuenta las capacidades no sólo por cuánto produces sino por cuánto
puedes producir. Es decir, si por ejemplo un barrendero con una minusvalía alta
trabaja 4 h podría cobrar lo que un barrendero en situación normal en 9 h. Pero
esto sólo se podría cumplir cuando haya un desarrollo socialista amplio de las
fuerzas productivas. Poco a poco
se reducirán las diferencias salariales per se y tan sólo se tomará en cuenta
un breve incremento o descenso en tanto el trabajo sea más duro, socialmente
útil, demandante de capacidades del trabajador, o no.
1.3. Jornada laboral de 35 horas semanales
máximo. Estará prohibido trabajar horas extra y el trabajo nocturno. A excepción de
los trabajos nocturnos inevitables donde se constará de una remuneración
especial y complementaria, con 6 horas de trabajo máximo por jornada y demás
suplementos que concurran. Esto
sería realizable desde el primero momento, pero sólo parcialmente. Consideramos el periodo del trabajo nocturno desde
las 20:00 p.m. hasta las 05:00 a.m. En
base al punto anterior, debemos señalar que la jornada laboral máxima quedaría
reducida en los trabajos más duros y según el grado de discapacidad del
trabajador en cuestión y cómo afecta esto a su desempeño laboral (cosas que ya
hoy son perfectamente mesurables). Así, a mayor dureza y mayor incapacidad para
ejercer un trabajo, con el desarrollo del socialismo, la jornada laboral sería
mucho menor que aquélla tomada “por término medio”.
1.4. Jubilación a los 62 años de edad
general y 59 en
especial para los trabajos duros tales como los fabriles, de construcción,
minería, campo y tratamiento de residuos. En ciertos casos que sea requerido se
podrá adelantar dicho plazo hasta la edad que sea necesaria. Por ello se
organizará un sistema de pensión única –no se permite las pensiones privadas- y
pública. Proponemos un sistema de
gestión de las pensiones que sea flexible y popular, en el que los trabajos más
difíciles o socialmente necesarios (decididos como tales por el Gobierno
Popular y modificable por los Consejos del Pueblo que lo sustituyan) coticen
por año el equivalente a más tiempo medio de cotización. Además, se asegurará
una producción de excedente para almacenar (gracias a la destrucción de la
deuda externa) y permitir no sólo la jubilación flexible según hemos indicado
aquí sino, con la mayor productividad socialista, la reducción general de las
horas de trabajo y el aumento del tiempo de ocio.
1.5. Establecimiento obligatorio de la ley del
descanso de fin de semana y 45
días de vacaciones por año elegidas
por el propio trabajador.
1.6. Abolición de los contratos temporales.
1.7. Prohibición del trabajo de los niños menores de 16
años. Los menores de 18 años que trabajen deben tener un horario acorde a lo
que le permitan sus estudios.
1.8. Establecimiento de un sistema de
Consejos del pueblo locales e intermedios (autonómicos, provinciales, etc.), de
un Consejo Agrario en cada una de las cooperativas agrícolas y de un Consejo
Obrero en cada centro de trabajo fabril. Los Consejos del
Pueblo son asambleas populares compuestas por obreros, campesinos, asalariados,
pequeño propietarios y comerciantes de patrimonio humilde, estudiantes
reivindicativos o provenientes de familias trabajadoras e intelectuales
progresistas. De la misma manera, existirán también los denominados Consejos
Obreros y Agrarios. La diferencia entre los Consejos del Pueblo y los Consejos
Obreros y Agrarios radica en que éstos últimos están constituidos
homogéneamente por obreros -los Consejos Obreros- o campesinos cooperativistas
(es decir, que se hayan sumado a las cooperativas agrícolas del campo) -los
Consejos Agrarios-. Y, evidentemente, estarán situados en diferente zona: los
Consejos Obreros en las grandes fábricas, los Consejos del Pueblo en el seno de
los barrios obreros y los Consejos Agrarios en las cooperativas agrícolas del
campo. Este Consejo Obrero, como los Consejos del Pueblo, será gestionado por
(y participarán solamente) los trabajadores; los empresarios
no tendrán participación ninguna. Es decir, lo conformarán trabajadores y serán
elegidos por los mismos trabajadores. En cuanto a los Consejos Agrícolas lo
mismo, los constituirán solamente los agrícolas cooperativistas. El Consejo
Obrero será el encargado de aplicar y controlar conjuntamente con el Consejo del
Pueblo los puntos del programa mínimo, leyes fabriles, estatutos generales y
especiales, etc. Este consejo se regirá por el centralismo democrático y la
crítica- autocrítica para depurar a los trabajadores que degeneren en obreros
aristócratas, tecnócratas, intelectualistas y burócratas y todo tipo de
actitudes pequeño burguesas y del espíritu del lumpenproletariado. Los
pequeñoburgueses ricos no tendrán cabida en los Consejos salvo que se aposten
como elementos de la intelectualidad revolucionaria. En los Consejos del Pueblo
se integran los Consejos Agrícolas y los Consejos Obreros con el resto del
pueblo, con las masas que no están organizadas en ninguno de los anteriormente
citados. Los Consejos del Pueblo
celebrarán Congresos ordinariamente, cuyas resoluciones sean de obligado
cumplimiento y donde participen todos los Consejos del país como organismos
fundamentales. Entre Congresos, las decisiones de estos quedarán representadas
en el Consejo Central del Pueblo, que corresponde al Consejo del Pueblo del nivel
estatal, que coordina a todos los demás. Sus miembros serán elegibles y
revocables en todo momento por los demás Consejos.
1.9. Extender inspectores elegidos por el Consejo del Pueblo a todos los talleres,
fábricas y centros de trabajo. Todo centro laboral deberá ser inspeccionado
mínimo dos veces diariamente sin previo aviso de presencia por parte del
inspector. Todos los trabajadores deberán estar tanto colectiva -públicamente-
como individualmente -en secreto y confidencialmente- en estrecho contacto con
el inspector que se haya asignado a la empresa. El inspector debe rendir
cuentas ante los trabajadores del centro de trabajo asignado como ante el
Consejo del Pueblo. Cualquier transgresión de la legalidad obrera por parte del
inspector será sancionado bajo delito grave y se le procesará en un juicio
popular y sumarísimo.
1.10. Control por parte del Consejo del Pueblo de la Seguridad Social e Higiene en
el trabajo y de los precios del centro laboral y de la asistencia médica. En el supuesto de que no exista el
Consejo Obrero el empresario deberá aplicar y verificar exhaustivamente que se
apliquen todas las normas bajo control del Consejo del Pueblo. En el caso de
que el empresario viole la normativa laboral se le procesará bajo delito grave
y se ultimará todo en un juicio popular y sumarísimo.
1.11. Encarcelamiento inmediato y juicio
sumarísimo bajo delito grave a los empresarios que hayan infringido cualquiera
de las leyes y reglamentos laborales y los derechos inherentes de los
trabajadores. Esto supondrá una responsabilidad criminal por
quebrantamiento de las leyes de protección del trabajador. Los casos de
corrupción y arribismo serán asimismo juzgados y castigados con la pena más
severa.
1.12 Establecimiento de ley de la responsabilidad civil de los patronos por la pérdida
total o parcial de la capacidad de trabajo de los obreros a causa de accidentes o de las
condiciones nocivas de la producción.
1.13. En caso de accidente, enfermedad,
embarazo, etc., el trabajador deberá cobrar el cien por ciento del salario real.
1.14. Ampliación del periodo de baja por
maternidad desde el
inicio del embarazo hasta un año tras el parto.
1.15. Prohibición del trabajo de la mujer
embarazada en las ramas en que el trabajo es perjudicial para su organismo. La
misma prohibición se aplicará para los menores de 21 años con respecto a los
trabajos que perjudiquen el pleno desarrollo físico de los individuos en ese
rango de edad (16 años, el mínimo para trabajar, y los 21 años, cuando se
alcanza la adultez física). Establecimiento, en los aledaños de todas las
fábricas, talleres y demás empresas donde trabajen las mujeres, de casas-cuna
para niños de corta edad, o sea, de guarderías gratuitas y públicas; al año
siguiente del embarazo (una vez reincorporada la mujer al trabajo), mientras el
bebé aún está en período de lactancia, reducción de la jornada de trabajo de la
mujer a seis horas y una vez se hayan construido casas-cuna en todos los
centros de trabajo o en su amplia mayoría, permitir que la mujer salga del
trabajo cada tres horas, durando las ausencias media hora, para atender al bebé
2. Llevar a cabo una reforma agraria
popular que expropie sin
indemnización (es decir, confisque) a
los grandes terratenientes, convierta los latifundios en cooperativas sin patrón
que reciban la maquinaria a cada vez menos precio desde la industria
nacionalizada y colectivizada, y que ponga de nuevo en calidad de ley la máxima
“la tierra para quien la trabaja”. La tierra será asegurada para los
campesinos individuales, repartiendo entre ellos las tierras sin cultivar y
dejándoles la libertad de unirse a las cooperativas. Se reducirá la contrata de
mano de obra que no sea por parte del Estado. Queda abolido el derecho de
herencia para los medios de producción.
3. Nacionalización de todos los bancos
capitalistas y la fusión
de todos ellos en un único banco gestionado por el Consejo del Pueblo a nivel
estatal y central. Se acabará con la usura y el banco resultante servirá como
medio y herramienta para los trabajadores. Jamás para su expoliación y
sojuzgamiento.
4. Para poder llevar a cabo toda esta
serie de mejoras materiales y culturales mínimas que exige la penosa y
miserable situación del proletariado y del pueblo se procederá a nacionalizar sin indemnización a todas las grandes empresas (independientemente del sector),
además de; a las medianas industrias, fábricas, minas y talleres; todos los
bancos capitalistas; medianas empresas eléctricas; los medianos centros de
enseñanza; grandes inmuebles de las ciudades y en el campo; todas las medianas
empresas farmacéuticas; todos los transportes y medios de comunicación; los
medios de información, a excepción de los pequeños y medianos; todo tipo de
propiedades religiosas tanto como de la iglesia; todos los recintos deportivos
públicos y privados (a excepción de los gestionados democráticamente por el
barrio local), de todos los equipos deportivos y demás nacionalizaciones que se
requieran. Las nacionalizaciones sólo se extenderán a las grandes y medianas
empresas, nunca a las pequeñas empresas de patrimonio notablemente humilde. Las nacionalizaciones se harán
en miras a que puedan ser gestionadas por la futura red de Consejos del Pueblo.
Mientras esta no exista, se gestionará por el Gobierno Popular. Cuando los
Consejos del Pueblo existan en todo el Estado, o en su mayor parte, el Gobierno
Popular se disolverá (con todo lo que ello implica) y delegará en todas sus
funciones en los Consejos del Pueblo. Entonces todos los partidos salvo el PCTE
se declararán ilegales y el Gobierno pasará a ser la dictadura del
proletariado, materializada en el gobierno de los Consejos del Pueblo, de las
amplias organizaciones de masas en las que participa y dirige nuestro Partido.
Esto sólo se podrá hacer en la medida en que tengamos (como PCTE) el monopolio
de la influencia entre los Consejos del Pueblo.
5. Nacionalizar y colectivizar no pasa de
las empresas mencionadas en el punto 4. Los ciudadanos
tendrán derecho a disfrutar de sus bienes, de los productos de esa
colectivización, individualmente. Es decir, pueden invertir su salario en
posesiones que les serán reconocidas desde ese momento, pero que serán
facilitadas por el Estado, que las cede en usufructo perpetuo a los
individuos.
6. Regeneración del tejido industrial en España, dando prioridad a la industria
pesada y de bienes de equipo. Gracias al desarrollo de la industria y la
agricultura, aumentar los
puestos de trabajo y
movilizar en ellos a personas en condiciones de pobreza y a los parados con
prioridad.
7. Con todo lo dicho, destrucción del desempleo. Pero
mientras esto termina de tener lugar, los desempleados temporales obtendrán
unas mayores prestaciones en forma de ayudas económicas.
8. Derecho a una vivienda digna garantizado.
8.1. Liquidación inmediata con
el proceso de desahucios que
se está llevando a cabo.
8.2. Confiscación estatal de todas las
viviendas vacías de los bancos y de las medianas y grandes propiedades para ser cedidas a los desempleados sin
hogar y reducción de los pagos por seguros e hipotecas.
8.3. Las personas que estén ocupando casas y
habitáculos que sean propiedad de una familia trabajadora con un patrimonio
humilde, serán movilizadas a otros apartamentos expropiados sin indemnización (confiscados) a las voluminosas fortunas
anteriormente mencionadas.
9. Prohibición de la expatriación de los
inmigrantes ilegales. Sólo se procederá a expatriar a aquellos
sujetos que rechacen trabajar bajo las condiciones laborales contenidas en el
punto uno del presente programa mínimo y, a aquellos que sean penados por conductas
violentas, criminales, terroristas o golpistas y análogas. Se eliminará así con
la expatriación sistemática que se ejerce actualmente contra los trabajadores
inmigrantes ilegales y suprimirá la fuente de la que se nutren numerosas mafias
y extorsionadores. Desaparecerá la concepción nacionalista de nacionalidad, la
distinción entre trabajadores originariamente nacionales y aquellos nacidos en
el extranjero. La clase obrera no tiene patria.
9.1. Obtención de la ciudadanía por el mero hecho
de trabajar en territorio estatal durante un período mínimo de 6 meses. Todos
los inmigrantes tendrán el derecho a residir en España conforme comience a
trabajar en el territorio. Se suprimirá el erróneo concepto de “nacionalidad”,
y tomará su lugar el término “ciudadanía”, esto es: estar suscrito al Estado
como trabajador o perteneciente a una familia trabajadora. El emigrante (no
temporal) perderá tal ciudadanía. La recuperará de inmediato si inmigra a
territorio estatal y trabaja o está adherido a una familia trabajadora. Esta
será la única condición universal para la obtención de la ciudadanía.
10. Supresión de todos los impuestos actuales y establecimiento
de un solo impuesto progresivo en
su lugar.
11. Sustitución paulatina de los cuerpos de
Policía, del Ejército, de la Guardia Civil, Mossos, etc. por milicias populares
armadas, que sean parte de los Consejos del Pueblo, que las eligen. Esta medida comenzará
al hacerse electivos y revocables todos los cargos del Ejército, de la Policía,
etc. y al traspasarse armas a cuenta de estos cuerpos hacia los Consejos del
Pueblo.
11.1. Las labores
de las milicias populares quedarán subordinadas al Estado Obrero y estarán
coordinadas por un cuerpo central de “milicianos”, electivos y revocables en
todo momento. Las labores de la milicia se llevan a cabo por grupos de miembros
de cada Consejo del Pueblo, teniendo como menor ámbito el ámbito local. Estos
miembros se eligen en los Congresos de los Consejos del Pueblo. Sólo el pueblo trabajador armado es
garantía de la democracia contra los explotadores, de la dictadura
revolucionaria del proletariado.
11.2. Las milicias son asimismo la base tanto de la
nueva policía como del nuevo ejército. Sobre
las milicias se asientan funcionarios (elegibles y revocables en todo momento
por los Congresos de los Consejos del Pueblo) con formación militar, especializados, que coordinen las acciones de las
milicias y profesionalicen a los miembros de éstas que así lo deseen. Las milicias son, pues, las bases de la policía y el ejército regulares, bases que los sustentan
y eligen o revocan, por orden del
Consejo del Pueblo del que la milicia forme parte.
11.3. La instrucción militar básica es obligatoria para todo sexo salvo casos de incapacidad
física o mental. Dura doce meses, a término de los cuáles se podrá elegir si
continuarla o no. Las milicias contarán con miembros tanto profesionalmente
formados en el aspecto militar, como con miembros que no lo estén. La
instrucción militar básica tendrá
lugar a los 18 años. Sin embargo,
quienes no manifiesten ninguna incapacidad para el servicio pero por diversos
motivos no puedan tomar parte del servicio a los 18 años, podrán escoger los doce meses consecutivos en
que tenga lugar la instrucción militar básica con
un límite en los 23 años de edad;
es decir, podrán escoger en qué
año, desde los 18 hasta los 23 años, desarrollan el servicio militar básico. Este
servicio, asimismo, no anulará tiempo de estudio ni de trabajo, sino que se ajustará como prolongación
(en la medida de lo posible) del trabajo y el estudio que se desempeñaban antes
de empezar la formación militar básica.
11.4. No concebimos un ejército basado en la simple
obediencia, sino en la discusión de los problemas por parte de las bases y los
dirigentes y en la disciplina consciente, no obligada; basada en el centralismo democrático.
Asimismo esta debe ligarse al amplio estudio de las Ciencias en general, pudiendo escogerse el
nivel de profundidad de la enseñanza según las necesidades de quienes hagan el
servicio. El Ejército popular es
una escuela de formación técnica. Como
tal, rige en él la norma
educativa según la cuál la formación intelectual es inseparable del ejercicio
de un trabajo físico. El trabajo físico, durante la formación militar básica,
se ejercerá en el mismo lugar de destino. Los lugares de destino, las bases militares,
contarán con fábrica y con una granja colectiva, donde los soldados trabajen
mientras reciben su formación militar. Con ello, el ejército y la policía
estarían remunerados, al igual que los estudiantes, como trabajadores mientras
estudian y adquieren su formación militar básica, obligatoria.
11.5. El Ejército y la Policía son organismos
adjuntos a la organización de los Consejos del Pueblo; las milicias se
corresponden con los Consejos locales, y sobre éstas se alzaría un cuerpo de
organismos ligados a cada nivel
territorial de organización de los Consejos del Pueblo.
12. Salida del euro, de la Unión Europea y
de la O.T.A.N.. De la misma forma salida de la Organización para la Cooperación y
el Desarrollo Económicos (O.C.D.E.), Fondo Monetario Internacional y el Banco
Internacional para la Reconstrucción y el Desarrollo (B.I.R.D.). Restauración de la peseta a un
valor menos devaluado gracias
al control de su concurrencia por el Estado Obrero. Rechazo de todas y
de todo tipo de deudas contraídas por la burguesía del Estado burgués
español. Todas ellas
organizaciones imperialistas que sirven para los grandes magnates capitalistas
y burgueses para torturar la existencia del proletariado y los pueblos mediante
las guerras imperialistas y la esclavización y explotación asalariada.
13. Encarcelamiento inmediato de todos los
corruptos. Independientemente de su afiliación política,
ideología, etc. Juicio sumarísimo a todos ellos con pena grave y que: a)
devuelvan todo lo robado al pueblo, y; b) que mediante trabajos a la comunidad
reparen –como mínimo- todo lo robado y los perjuicios ocurridos a consecuencia
del robo al pueblo trabajador.
13. 1. Suprimir la diferencia salarial abismal entre
los representantes del Estado y las masas trabajadoras. Los representantes
no deben realizar su función por más del salario medio de un obrero.
14. Establecimiento de la sanidad
universal, gratis y de calidad. El problema de la salubridad es un problema
candente que afecta sobre todo a las familias trabajadoras y humildes en España.
Éste problema de la insalubridad no tiene solución bajo el capitalismo, pese a
que en según en qué sectores de la población y etapas se mejore gracias a la
lucha insobornable que libra el proletariado y los trabajadores revolucionarios
por imponer reformas que mejoren sus condiciones. Una vida plena, libre, culta y
acomodada ya no será monopolio de los “señoritos” burgueses y capitalistas, ni
de los elitistas pequeño burgueses y aristócratas obreros. Sino: será derecho
de todo el pueblo trabajador. El
carácter actual del deporte burgués y elitista sufrirá la misma mutación a un
deporte popular al servicio del bienestar y placer de los trabajadores. Por lo
tanto:
14.1. Dentro de los barrios obreros y de los
distritos agrícolas, se edificarán centros de salud provistos de médicos, nutricionistas y
demás especialistas de la salud competentes. Estos profesionales de la salud
serán elegidos, controlados y administrados por los trabajadores a través de
los Consejos Obreros, Campesinos y del Pueblo. En estos centros públicos con
prioridad se deberán aplicar los mejores e innovadores métodos científicos.
Todo esto con el modesto fin de prevenir enfermedades y deficiencias; de curar,
aliviar y restablecer la salud a las familias trabajadoras.
14.2. Estos centros de salud se coordinarán con los
recintos deportivos de los Consejos del Pueblo. Allá donde no existan centros
deportivos se construirán. Aparte de recintos deportivos también se edificarán
una variedad de recintos de descanso (balnearios, etc.). Los trabajadores de
los centros deportivos como los propios centros serán gestionados de la misma
manera que lo anteriormente indicado en los de salud. Se fomentará todo tipo de
actividad física y de deporte popular en los centros de trabajo, de enseñanza y
en los barrios. Otorgándoles un apoyo efectivo y una contundente financiación
desde el Estado mediante subvenciones.
14.3. Sustitución del sistema deportivo de
grandes multimillonarios mediante la nacionalización de los equipos de fútbol y
demás deportes (que pasarían
a ser propiedad del Estado Obrero). Y por ello, la obligación de sus jugadores
de desempeñar un empleo a tiempo parcial mientras entrenan. Disminución de su
salario al de un obrero medio y distribución colectiva de las propiedades que
posean y excedan el valor de dicho salario. Creación de horarios especiales en
los centro de trabajo para que estos elementos puedan compaginar sus
quehaceres. A su vez, se promoverán a los deportistas de alto nivel surgidos
entre las familias humildes y laboriosas.
14.4. Fijación dentro del
sistema educativo una educación alimenticia, física e higiénica sana.
15. El conjunto de Consejos del Pueblo se coordinará con las diferentes
asociaciones alimenticias e higiénicas para mejorar la vida y la salud del
pueblo y de los trabajadores.
16. Establecimiento de una serie de
derechos sociales y económicos hacia las personas que padezcan de alguna
enfermedad o deficiencia física o mental. Estos trabajadores
pasarán a ser protegidos y/o tutelados por el Estado Obrero. El Estado Obrero
acabará con las desventajas, injusticias e inferioridad que sufren estos
sectores e integrará a los mismos en el mundo social, laboral y educacional
mediante el otorgamiento de una serie de derechos económicos que necesiten así
como se les proporcionará un amplio marco jurídico para defenderlos y acabar
con los obstáculos que sufren. Asimismo se les proporcionará los especialistas
necesarios para poder llevar su
vida en total normalidad como cualquier otra que no padece de ninguna
enfermedad ni deficiencia. La
ley de la selva que rige en los Estados Capitalistas no imperará en un Estado
Obrero, en la verdadera democracia de las masas populares.
16.1. Se tendrá cuidado en producir alimentos
especiales para facilitar la existencia a quienes los requieran. Sólo la
planificación socialista basada en la tenencia de los medios de producción por
un Estado de los Consejos del Pueblo puede asegurar que se produzca según la
demanda de estos bienes, sin caer en la anarquía de la producción que lo mismo
arruina a un celíaco que a quienes sigan dietas específicas por propia
decisión.
17. El Estado Obrero basará su fuente
eléctrica y energética en las energías renovables, como garantía de la independencia del país.
17.1. Nacionalización de todas las grandes y
medianas empresas eléctricas (ya sean nucleares, renovables, etc.)
17.2. Se prohibirá utilizar la energía
nuclear para obtener energía conforme
se desarrolle el punto 16. Sólo se hará
uso de la energía nuclear para experimentación científica y de laboratorio.
18. Establecimiento de una educación pública, gratuita y
científica al servicio de la clase obrera y del pueblo. Un sistema educativo que ligue la
teoría científica con la práctica, experimentando así su realidad.
Supresión del actual modelo de enseñanza por un plan educativo a nivel estatal
basado en la armonía entre el trabajo físico y el intelectual. Pudiéndose combinar el trabajo manual con la
del estudio ininterrumpido. Para ello se establecerá un horario acorde para
la combinación del estudio con el trabajo, combinando de esta manera, la
educación con la producción material. Además de esto, debemos destacar que el
analfabetismo y la incultura bruta e incivilizada siguen existiendo en España,
derivadas de un pasado fascista aún latente y sensible. Siendo esto
característico en las zonas rurales. Por ello mismo se realizarán cursos y
cursillos donde se liquide el
analfabetismo y se eduque en
una cultura mínima a todos los habitantes del Estado.
18.1. Supresión de la LOMCE y del Plan
Bolonia.
18.2. Derogación de todo tipo de leyes de educación
reaccionarias, obscurantistas y retrógradas.
18.3. Nacionalización de todos los centros de
enseñanza siendo éstos: guarderías, escuelas, institutos y universidades. Las
academias de empresas pequeñas o medianas no sufrirán ninguna clase de
nacionalización. Las grandes academias sí serán nacionalizadas.
19. Creación de organizaciones estatales de
grupos obreros y populares de producción cultural y artística de teatro,
de literatura, cinematográfica, etc. Así como el apoyo y el fomento de los
pequeños grupos culturales y artísticos que fomenten la cultura y valores
proletarios. El arte de estos grupos deberá tener un contenido progresista,
pero no abstracto, y debe ser concreto, estar conectado con las vivencias y con
la realidad de las masas populares.
20. El Estado Obrero promoverá la educación y la cultura
científica. El Estado Obrero se declara como un Estado científico, y por lo
tanto, ateísta. Y como Estado Obrero, nacido del pueblo, las familias humildes y honestas que
sean religiosas no sufrirán ninguna clase de coacción, se les protegerá como el resto de ciudadanos del
pueblo.
20.1. Nacionalización de todo tipo de
propiedades religiosas tanto como de la iglesia. Pasarán a ser
utilizadas como museos y con otro tipo de finalidades y actividades culturales.
20.2. Ningún tipo de educación podrá tener carácter
religioso.
20.3. Se anulará el concordato con el
Vaticano.
20.4. Toda costumbre y arraigo religioso
machista, chovinista o clasista estará prohibido, así como el machismo, clasismo y
chovinismo estarán penados por ley.
21. Nacionalización de los transportes y
medios de comunicación. Adoptar medidas pertinentes para mejorar su circulación, servicios,
limpieza, etc., y establecer unos precios
bajos y asequibles para las
familias trabajadoras.
22. Liberación de los presos políticos
encarcelados por la defensa de la clase obrera y el pueblo trabajador. No se incluyen los defensores del
capitalismo y los detractores de la clase obrera. Tampoco los terroristas y
aventureristas que han acarreado daños al pueblo y al Movimiento Obrero. Reincorporación de todos los
despedidos en el ámbito laboral y la readmisión de los despedidos si es por
razones de índole político-ideológico. Supresión
de la ley mordaza y liberación de aquéllos que hayan sido apresados por ésta.
23. Derecho de autodeterminación política de las
naciones que componen España. Estas naciones podrán separarse del Estado español, en cuanto lo deseen sus Consejos del Pueblo. En base a ésta línea popular:
23.1. Referéndum para el derecho a la autodeterminación de las masas
laboriosas de Euskadi, Cataluña y Galicia.
23.2. Referéndum a Gibraltar para
obtener respuesta de su pertenencia a España o a Gran Bretaña y, en caso de
afirmarse lo segundo, asegurar que no hay bases navales hostiles en el peñón.
Igual proceso para las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla y para las
Islas Canarias.
24. Disolución y juicio a la monarquía y todos sus elementos y fuerzas coaligadas
con ella. Debido a que representa una reminiscencia del pasado fascista y
feudal, con un gran listado de crímenes, torturas y genocidios contra el pueblo
trabajador y progresista.
25. Disolución, completo desarme y juicio
a todas las organizaciones fascistas y terroristas, liquidando asimismo las bases materiales de los
reaccionarios, terroristas y golpistas.
26. Expulsión de todas las fuerzas
imperialistas de España. Retirada total de las bases militares
extranjeras en territorio español. De la misma manera: retirada del ejército
español en territorios extranjeros.
27. Prohibición de la prostitución. Los
proxenetas, mafiosos y todos los grandes directores y propietarios de las
grandes y medianas empresas pornográficas serán procesados y encarcelados de
inmediato bajo pena grave. Las
prostitutas serán integradas en el mundo laboral mediante la persuasión. Se las
protegerá frente a la extorsión y las amenazas por parte del Estado Obrero. Y además de esto, recibirán una serie de ayudas
especiales análogas a las del punto 15 debido
a la situación específica que sufren.
28. Prohibición de las drogas a excepción
del tabaco y el alcohol. Su distribución será controlada desde el
Estado con el objeto de acabar con la dependencia que éstas engendran y de
combatir una de las grandes bases económicas y sociales de las que se alimenta
directamente el lumpenproletariado, y más e indirectamente, la burguesía a
través de su escoria de mafias y camellos. Se combatirá insobornablemente
mediante la persuasión el consumo anormal de alcohol y el tabaco.
28.1. Establecimiento de un precio
relativamente alto en los precios de las bebidas alcohólicas de graduación alta
y de tabaco.
28.2. Penas duras para los mismos
productores y distribuidores de toda clase de drogas. Según la cantidad y el tipo de droga la pena
será más dura.
28.3. Se insertarán en el sistema de salud las
drogas que, como la marihuana, que alivien la existencia y la vida a los
enfermos de enfermedades que sean necesarias. Todo esto bajo control público y
una rigurosa regulación médica.
29. El problema gitano es un
problema sensible existente que sufren estos sectores y todo el pueblo
trabajador y sólo se resolverá mediante su integración al mundo laboral y a
través de la elevación de su nivel cultural. Las actuales
organizaciones gitanas serán desmanteladas y se procederá a su integración
completa con la sociedad. Los dirigentes de las bandas gitanas (en caso de no
disolverse y de no subordinarse a la justa política del Estado Obrero), a los
elementos explotadores del seno de estas organizaciones gitanas y a todos los
elementos "gangsteriles" de las mismas serán duramente perseguidos y
encarcelados. Los gitanos que se encuentren desmembrados de la sociedad serán
incorporados a los barrios obreros recibiendo una vivienda en alquiler con un
trabajo regulado por el Estado acorde a su proceso de integración con la
sociedad. Todo este proceso se realizará disgregando a los grupos y bandas
gitanas e insertándolos en estos pisos separadamente entre los mismos
gitanos para prevenir posibles conflictos. Así se destruirá la vida aislada,
estrecha, atrasada y anacrónica que llevan los gitanos nómadas y acampados. A
los gitanos integrados en la sociedad se les ayudará para crear organizaciones
culturales dónde se estudie y promueva la cultura progresista y centenaria de
éste pueblo, y de este modo, enriquecer a la cultura obrera internacional. El
Estado Obrero será un Estado plurinacional, multicultural y plurilingüe.
30. Se realizará un uso
eficiente y planificado de la naturaleza. Se
establecerán unas leyes donde se persiga la contaminación indiscriminada y se protegerán los paisajes
naturales, ríos, playas, etc., con el propósito de que los trabajadores
puedan disfrutar de estos para relajarse y descansar.
30.1. El Estado Obrero defenderá su fauna autóctona
y se posicionará resueltamente contra
el maltrato y sufrimiento animal. Por ello:
30.2. En todos los festejos donde se inflija daño (físico
como psicológico) a un animal serán prohibidos; véase como
ejemplo un caso muy conocido en nuestro país como
las corridas de toros.
30.3. Se llevará a cabo un control riguroso de
distribución de los animales (ya sean domésticos o de otras labores) para evitar el abandono y sufrimiento
animal. Un animal dejará de ser considerado jurídicamente como “cosa”, como
objeto para satisfacer delirios egoístas y, pasará a ser considerado como un
ser vivo con derechos.
***
Aprobado por el C.C. del P.C.T.E. el 19 de marzo de 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.