"(...) También es cierto que muchos sectores provenientes de la pequeña burguesía
manifiestan un cuadro más que aburrido y dantesco acerca de la mujer desde el
punto de vista de un proletario, de un revolucionario profesional. Estos
elementos perfilan una mujer alienada y degenerada, una mujer burguesa o
pequeño burguesa que se desenvuelve en la vida lumpen-capitalista y que, a lo
único que aspira, es a explotar y a vivir a costa del hombre y de la mujer
proletaria. Una mujer a todas luces que pertenece al viejo mundo, al régimen
burgués, no a la mujer nueva junto a su hombre nuevo que pretendemos crear los
comunistas. Aquélla mujer, como nos es visto, irá a parar junto con sus “amigas
y amigos” burgueses al estercolero de la historia. La gran mayoría que promueven
este tipo de vida como solución al problema femenino son las llamadas y
llamados “feministas”. Un movimiento que:
“En comparación con este
poderoso movimiento de las trabajadoras, el movimiento liberal de las
intelectuales burguesas es un juego de niños inventado como pasatiempo.” (Stalin; Saludo al Primer Congreso de
Mujeres Montañesas, 1921)
El feminismo como término, como concepto, es totalmente erróneo y
reaccionario desde un punto de vista científico, marxista. Según autores
revisionistas y burgueses el surgimiento del “feminismo” se debe a los
movimientos sufragistas –partidarios de la concesión del voto a la mujer- y que,
transcurridos unos años tras estos, se comenzó a acuñar el término “feminismo”.
Pero esto es del todo incorrecto, es una absoluta mentira. Para empezar, los
movimientos democrático-burgueses que exigían la concesión del voto a la mujer
no se proclamaban “feministas”, hubo muchísimas denominaciones, pero feminismo
no se encontraba entre ellas. Es más, los pocos y minúsculos grupos de mujeres
que se denominaban “feministas” en su mayoría eran organizaciones netamente
pequeño burguesas que despreciaban a los obreros y contraponían al hombre
abstracto respecto a la mujer abstracta. En los años 40-50 del pasado siglo XX
todos los Movimientos Obreros Femeninos fueron absorbidos por los Partidos
Comunistas de entonces en sus frentes de masas, dejando en completo ridículo a
esos grupos de pequeño burgueses “feministas” aliados del imperialismo y del
fascismo. El distintivo de “feminismo” apareció después, tras la llegada de los
revisionistas al poder de la Unión Soviética y de los Partidos Comunistas,
cuando a consecuencia de esto último comenzaron a nacer y a invadir
ininterrumpidamente un conjunto de ideas revisionistas, pequeño burguesas, en
el seno Movimiento Obrero y Comunista, tanto como en el Movimiento Obrero
Femenino. A partir de aquí miles de teóricos e intelectuales burgueses y
revisionistas comenzaron generalizada y sistemáticamente a inventarse una serie
de tesis que describían a aquel monstruo ideológico que se decía ser el
“feminismo” y los “feministas”.
Sin embargo, a propósito de esta sección, tampoco nos podemos olvidar de
los ridículos pseudocomunistas que se llaman también feministas, y, por ello,
hemos de decir lo siguiente:
- Marx y Engels nunca se proclamaron como “comunistas feministas”, dejando escrito que los verdaderos comunistas hemos de dirigir el Movimiento Obrero Femenino. Teorizaron con el término femenino no feminista;
- Lenin y Stalin del mismo modo jamás emplearían la expresión “feminismo” ni “feminista”, en cambio sí femenino al igual que Marx y Engels (véase Movimiento Obrero Femenino);
- Enver Hoxha y los marxistas-leninistas de entonces condenaron a las organizaciones “feministas” despectivamente observando en ellas las entrañas ideológicas y políticas de la mujer pequeño burguesa tratando de envenenar la conciencia de la mujer trabajadora y de todo el Movimiento Obrero en general.
Algunos otros nos pueden decir que no entendemos el significado del
“feminismo”; que el propósito de éste es igualar a los hombres y las mujeres en
sus derechos y deberes. Pero ahora bien, este supuesto solo abarcaría los
derechos sobre el papel, sin derrocar (ni pretender) a los capitalistas. Y como
hemos visto con el derecho al aborto, estos derechos son tan sólo derechos
paras las clases explotadoras dominantes. Sin abolir la propiedad privada sobre
los medios de producción no se podrá hablar de acabar con las diferencias entre
hombres y mujeres en el plano jurídico, político, económico… Por lo tanto, si
el “feminismo” no se propone acabar con la propiedad privada sobre los medios
de producción (y desde el momento en que lo reconoce deja de ser “feminista”,
pasando a ser comunista, pues tal tarea es una tarea de clase y no de sexo o
género), en realidad no se propone la igualdad de hecho entre los sexos. Si a
los comunistas nos pareciese suficiente reconocer derechos sobre el papel como
derechos reales, hace tiempo que habríamos sucumbido a la demagogia de las
constituciones burguesas, que reconocen en su artículo 10 el derecho
inalienable de los trabajadores para reconocer en el artículo 11 el derecho inalienable
de los capitalistas, cuando ambos se contraponen y los capitalistas siguen
teniendo en sus zarpas los medios de producción, garantes del auténtico poder.
Pero para finalizar con este apartado debemos dejar en claro varias
cuestiones. Al igual que existe el problema colonial y nacional, existe el
problema femenino. Pero no el “problema feminista”, ni la cuestión “feminista”.
Al igual que existe el Movimiento de Liberación Nacional, existe el Movimiento
Obrero Femenino. Pero no el Movimiento Feminista. Camaradas obreros y
comunistas: dejemos que los revisionistas se queden con sus degeneradas
feministas y su “precioso” término; forjemos nosotros a las mujeres
revolucionarias que insertarán junto a nosotros las ideas marxistas-leninistas
en el Movimiento Obrero Femenino para liberarnos del yugo imperialista, de las
miles de cadenas que impone el capitalismo ya sea por ser obreros, campesinos,
mujeres trabajadoras, por ser de diferente raza o nacionalidad, etc."
(Extraído del Programa aprobado en el I Congreso del Partido Comunista del Trabajo de España; La Emancipación de la Mujer)
(Extraído del Programa aprobado en el I Congreso del Partido Comunista del Trabajo de España; La Emancipación de la Mujer)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.